12 Libros completó 12 libros. Empecé con Pascual Duarte y terminé con La Celestina, y entre ellos hemos recomendado otras 10 obras que me apasionan.
Cuando comencé el proyecto, mi objetivo era hablar de libros. Poco después percibí que en realidad 12 Libros me servía sobre todo para escuchar nuevos mensajes sobre esos libros que ya había leído una y otra vez. Dorian Gray me llevó en su día a Chopin; hoy es Chopin, al escucharle, quien me sugiere nuevos aspectos de Dorian, de Wilde y del retrato.
En «Ayuda e inspiración» escribí algunas sugerencias sobre cómo encontrar contenidos relacionados con un texto: buscar el título o el nombre del autor en YouTube, en la web de la Biblioteca Nacional, en servicios de música como Spotify, en servicios de noticias como Menéame… Esta solución a cómo construir entradas de 12 Libros ha resultado un verdadero sendero de feliz aprendizaje, que ya poco tiene que ver con 12 Libros y que solo puedo recomendar. Cuando te acabes un libro que hayas disfrutado y desearías que continuase, busca su título o su autor en webs, archivos, bibliotecas, redes de blogs, portales de noticias… Es como si el texto continuase fuera del texto.
Al margen del aprendizaje personal, 12 Libros ha sido un ejercicio de constancia y regularidad. También ha resultado una manera de relacionar y documentar sistemáticamente diferentes datos que tenía en parte en mi memoria, en parte en mi memoria USB.
Quiero agradecer a Josué Tirado su ayuda y amabilidad, y a todos los que de un modo u otro han apoyado el proyecto.
12 Libros y yo nos vamos a dar una pausa para pensar qué aspectos pueden mejorarse —que sé que son muchos— y cómo hacerlo. Creo que estarás conmigo que un número perfecto para detener un proyecto llamado 12 Libros es la docena.
Durante esta pausa estaría encantado de escuchar opiniones o propuestas sobre el proyecto. Tanto de su transcurso hasta ahora así como su desarrollo futuro o posibles colaboraciones.